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Destete Respetuoso

Si bien sabemos que el amamantar es una de las vivencias más íntimas y maravillosas que podemos experimentar con nuestros hijos, el decidir hasta cuando hacerlo no es fácil, y razones hay miles, debido a la falta de experiencia, de información, consejos erróneos y estigmas sociales infundados respecto al tema, solo por nombrar algunos.

Como antecedente y para que estés al tanto de las normas de salud mundial, quiero contarte que la Organización Mundial de la Salud recomienda la lactancia mínimo hasta los 2 años de edad. Por ende si llegaras a escuchar a un profesional de la salud refutar este tiempo está contradiciendo las normas internacionales en Salud.

Como sabes, a través de nuestra evolución el destete se ha producido espontáneamente o de común acuerdo entre la madre y el hijo. Esto suele suceder entre los 2 y medio años y los 6 años de edad, de forma completamente natural y en algunos casos antes.

En la actualidad, el escenario es un poco difícil, lo que solía ser natural, hoy es muy “opinable y cuestionable” por quien se sienta con la atribución de hacerlo.  Muchas personas que carecen de información suelen pensar y decir que la Leche materna luego de cierta edad, generalmente después de los 6 meses no alimenta que es  ”de mala calidad”, es fundamental que sepas que la Leche Materna es siempre el mejor alimento para tu hijo. Por esta razón siente la libertad de observar tanto tus ritmos como los de tu hijo para decidir en forma conjunta y tranquila cuando sea el momento adecuado.

Consejos Para un Destete Respetuoso:

  • Cuando te hayas decidido, te recomiendo que lo converses con tú marido o pareja de apoyo para que pueda tomar un rol activo en este proceso, entregándole contención y mucho cariño al niño.
  • Respetar los tiempos: es fundamental que el destete sea en forma paulatina, sobretodo cuando la decisión es unilateral, es decir, sólo la madre o los padres quieren que se produzca, pero el niño aún no está preparado. El proceso de destete puede durar desde un par de semanas hasta 3 o 6 meses e incluso más. No te aflijas ni te angusties, es un proceso que necesita de tiempo, aprendizaje y contención.
  • Evita el uso de extractor: si quieres destetar, junto con no ofrecer el pecho, debes dejar de estimular la producción de leche materna. Recuerda que a menor estimulación, menor es la producción de leche, disminuyendo los riesgos de ingurgitación (edema), obstrucción y mastitis.
  • Aplaza las tomas: es decir, salta una toma y acorta el tiempo de la mamada, esto permitirá ir reduciendo la producción láctea lentamente. Es importante que hidrates y nutras a tu hijo adecuadamente, si comienzas a quitar el pecho; ya que, es fundamental cuidar su salud y estado nutricional durante este proceso. Si tienes dudas convérsalo con un experto.
  • NO ofrecer, NO negar. Es fundamental comenzar por no ofrecer el pecho, esto es un desafío ya que deberás aprender otras técnicas de contención como darle masajes, leer un cuento, pintar un libro, cantarle una canción, etc.

Si tú hijo te pide el pecho deberás no negarlo, más bien proporcionarlo en las ocasiones que el niño lo requiera. Ya verás que las tomas se irán espaciando lentamente.

  • Contar con el apoyo del padre o figura de apoyo para el niño con el fin que pueda encargarse de la alimentación a través del biberón, es decir, al comienzo es mejor que “la figura de apoyo” le proporcione el biberón o hidratación en mamadera, vasito o jeringa (dependerá de la tolerancia del niño). De esta manera el niño comenzará a asociar la alimentación a una figura distinta a la madre.
  • Paciencia: Si el destete es inevitablemente forzoso por motivos de salud, inserción laboral o decisión de la madre, es fundamental la paciencia en este proceso; ya que muchos niños hacen huelga de alimentación, rechazando todo tipo de mamaderas, vasitos, fórmulas lácteas, jugos de fruta, etc. Es completamente normal y ya verás que en un par de semanas comenzará a ingerir poco a poco la fórmula láctea. Puedes partir brindándosela con cuchara o jeringa mientras sigues intentando con mamaderas y vasitos. Nunca olvides atender las demandas emocionales de tu hijo en este tema y si tú no estás presente por diversos motivos transmite a tu red de apoyo que están destetando para que así puedan ser acompañados.
  • Recuerda que el destete es un proceso no sólo del niño, sino también de la madre y puede generar muchos sentimientos de culpa y frustración. Busca contención, las madres también necesitamos ser contenidas.

Romina Vergara, Mamá de Josefa y Lorenzo, Nutricionista Materno-Infantil, Diplomada en Alimentos Funcionales(INTA), Educadora en Diabetes(ADICH), Diplomada en Docencia Efectiva(U Mayor),Especialista en Lactancia(Formación IBLCE)